Luz para nuestros días

Desde hace algunas semanas he tenido pesado el corazón. Quiero escribir cosas positivas, algo que nos mantenga animados en estos días aciagos en Guatemala. Pero todo lo que me ha rodeado en estos días han sido malos augurios con la situación sociopolítica. No he podido escribir algo de mi agrado… Pero Dios en su Misericordia puso en mi camino un blog que quise compartir por lo bello e ideal para nuestros días.

La Dra. Carrie Gress compuso una bella letanía “como remedio a la oscuridad en nuestro mundo” como ella misma afirma. Aún en estos momentos oscuros por los que nuestro bello país atraviesa, siempre podemos recurrir a El que es la Luz del Mundo, y pedirle que nos ilumine e ilumine esos lugares oscuros que predominan. Espero les sea de utilidad. Cuenta con el “Imprimatur” del muy reverendo obispo Liam Cary, Obispo de la Diócesis de Baker, Oregon.

Cristo Rey NCSJB

Letanías de la Luz

V. Señor, ten piedad de nosotros.
R. Cristo, ten piedad de nosotros.
V. Señor, ten piedad de nosotros. Cristo, escúchanos.
R. Cristo, escúchanos con gracia.

Dios, Padre celestial,
Ten piedad de nosotros
Dios, Hijo, Redentor del mundo,
Ten piedad de nosotros
Dios, Espíritu Santo
Ten piedad de nosotros.
Trinidad Santa que sois un solo Dios,
Ten piedad de nosotros.

Cristo, Luz del Mundo, escúchanos.
Santa Madre de Dios, ruega por nosotros.
Madre del Nuevo Amanecer, ruega por nosotros.

Santísima Trinidad, fuente de toda luz,
ilumina la oscuridad en nuestro mundo.
A las mentes de aquellos que están oscurecidos por el pecado,
tráeles tu luz.
A los corazones de los que están atrapados por la pornografía,
tráeles tu luz.
A aquellos que sufren depresión o enfermedad mental,
tráeles tu luz.
A las almas esclavizadas por el abuso de sustancias,
tráeles tu luz.
A aquellos que están sobrecargados por la atracción por el mismo sexo,
tráeles tu luz.
A aquellos dominados por la ansiedad y el miedo,
tráeles tu luz.
A los corazones de los que lloran,
tráeles tu luz.
A las almas y cuerpos de los abusadores y los abusados,
tráeles tu luz.
A aquellos que no tienen lugar para llamar a casa,
tráeles tu luz.
A los que intentan matar en el nombre de Dios,
tráeles tu luz.
A las clínicas de aborto,
tráeles tu luz.
A los burdeles y lugares de tráfico humano,
tráeles tu luz.
A los hospitales, farmacias y residencias de ancianos,
tráeles tu luz.
A las aulas donde se propaga desesperación, confusión y falsedad,
tráeles tu luz.
A las calles violentas e infestadas de drogas,
tráeles tu luz.
A territorios devastados por la guerra,
tráeles tu luz.
A las tierras oscurecidas, inundadas o destruidas por desastres naturales,
tráeles tu luz.
Dondequiera que haya confusión, desesperación, soledad e ira,
tráeles tu luz.

San José, ruega por nosotros.
Santa María Magdalena, ruega por nosotros.
Santa Lucía, ruega por nosotros.
San Agustín, ruega por nosotros.
Santa Hildegarda de Bingen, ruega por nosotros.
Santa Clara, ruega por nosotros.
San Alberto Magno, ruega por nosotros.
Santo Tomás de Aquino, ruega por nosotros.
San Buenaventura, ruega por nosotros.
Todos los coros de los ángeles, rueguen por nosotros.
María, Luz en la oscuridad, ruega por nosotros.

V. Luz del Mundo, que quitas los pecados del mundo,
R. perdónanos, Señor.
V. Luz del Mundo, que quitas los pecados del mundo,
R. Escúchanos con gracia, Señor.
V. Luz del Mundo, que quitas los pecados del mundo,
R. ten piedad de nosotros, Señor.

Amen

Imprimatur: Muy Reverendo obispo Liam Cary, Obispo de la Diócesis de Baker, Oregon.

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